Empalme, Sonora.- Los bajos precios que prevalecen en el mercado, 'y que no dan con los números', aunado a la baja producción que se siguen manejando, hacen que el ciclo camaronero 2025 - 2026 se esté tornando incosteable, lamentó Gilberto Cota Valdez.
El presidente de la Federación de Cooperativas Pesqueras de Empalme manifestó que la temporada extractiva de camarón se ha hecho un mercado libre, "porque las comercializadoras te están pagando a cómo te dejes, no a cómo debe de ser un precio justo y acorde a la calidad del producto".
Señaló que el kilo lo están pagando en promedio a 160 pesos ya descabezado, en este caso la talla 16/20, que es la que prevalece, pero a algunos lo pagan más barato, y hay quienes regatean y 'les sacan' un poco más a los compradores.
Muchos pescadores han optado mejor por vender en la 'orilla', cuando llegan a los muelles a descargar lo que capturaron, a un precio promedio de 130 pesos el kilo con cabeza, anotó.
Cota Valdez expuso que los costos de producción casi no dan margen a utilidad, pues cada vez los insumos están más caros, mientras las comercializadoras buscan comprar el camarón más barato, “y te lo pagan cuando ellos quieren”.
Indicó que el precio de gasolina roja es de 27 pesos, y utilizan de 30 a 40 litros por salida, el aceite vale a 170 pesos el litro, y a eso hay que agregarle al menos mil pesos de hielo, en lo cual ya se invirtieron más de 2 mil pesos.
Mientras que con la producción promedio, que es de 30 kilogramos, a 130 pesos el kilo con cabeza, suman tres mil 900 pesos, por lo que la utilidad es baja y no va a acorde con la actividad, tomando en cuenta que se reparte entre dos o tres pescadores. “No da la ganancia con el esfuerzo y los peligros a los que se enfrentan los compañeros en las jornadas de captura”, puntualizó.
“Y a esto, rogándole a Dios que los equipos no sufran algún desperfecto, porque aquí hay que comprar refacciones muy caras, a lo que se le debe de sumar la mano que obra, que por ser algo especializada también requiere de un alto costo”, agregó.
Algunos pescadores tanto de Guaymas como de Empalme han entrado a un receso en la incipiente temporada camaronera, y están esperando que haya mayor volumen de calamar en aguas regionales, para migrar a esta pesquería que llega a ser más redituable.
Fuente: Tribuna del Yaqui
