Ciudad de México.- En este presente curso, el mundo virtual continúa dando paso agigantados para hacerse con espacios vitales de desarrollo económico. Han pasado muy pocos años desde que Internet generalizó su uso en todo el planeta, permitiendo a muchísimas generaciones de seres humanos logran contactarse a través de ZOOM, Skype, Google Meet o trabajar con modelos tales como Prezi, Microsoft, Google Drive entre otros.
Bien es cierto que persiste una pandemia que ha contraído la economía durante estos últimos meses. Para paliar estos efectos negativos, cada vez son más las alternativas que se promueven para desarrollar organizaciones, negocios, plataformas o sitios web que te permitan realizar las mismas actividades que haces en tu vida cotidiana a través de páginas virtuales. El comprar productos o adquirir servicios de forma online cada vez es más fácil y novedoso, por lo que no es de extrañar que haya negocios que hayan desarrollado una industria por internet.
Entre estos, no debemos dejar de mencionar la industria de los casinos online, los cuales en España han dejado números insólitos de flujo de usuarios (más de 10 millones de personas mensuales) de actividad a través sus plataformas de juego. Su trabajo de desarrollar unos sistemas de juego tales como Blackjack, Ruleta, juegos de mesa, bingo o tragamonedas son muy novedosos y ofrecen experiencias muy parecidas a las establecidas en los establecimientos físicos dedicados a esta actividad.
Entre las realidades emergentes, se está dando a conocer Party Casino, operador del grupo GVC, que ha introducido numerosas innovaciones de software y una nueva forma de introducir el juego en el público español. Con ello, han logrado colarse como uno de los negocios menos afectados por la pandemia del COVID-19, dejando a su paso un concepto de estabilidad muy poco visto en cualquier otro negocio durante el año.
Ahora bien, ¿en qué se basa este negocio para lograr tanto éxito dentro del mundo virtual? Muchos se han preguntado cómo este mundo está tan bien manejado bajo unas drásticas restricciones y normas a la hora de que cada una de estas plataformas obtenga su licencia de la Dirección General de Ordenación del Juego. La respuesta se divide en cuatro aspectos bien marcados dentro de estas plataformas:
-Privacidad: la política de privacidad de páginas web de esta naturaleza prohíbe a aquellos administradores de las mismas, revelar algún dato sobre cualquiera de los usuarios que accedan a los juegos online de la plataforma.
-Tecnología: el uso de los últimos avances tecnológicos permite a las compañías generar una experiencia única a cada usuario en las distintas plataformas del juego, acercándose a un ambiente “real” que tanto demandan los clientes a la hora de participar en este tipo de actividades. Sin duda, los nuevos softwares que se utilizan en sitios como Pokerstars están dentro de los más innovadores del mercado.
-Seguridad: los métodos de verificación de la identidad de cada usuario permiten reconocer la edad que poseen los mismos, así como datos personales que aseguran la transparencia y mayoría de edad de los consumidores que participan en los servicios destacados de las plataformas. Esta característica unida a la política de privacidad, permiten un ambiente de desempeño del juego muy seguro e inteligente.
-Ofertas: para nadie es un secreto que las ofertas y promociones utilizadas por estas páginas web se vuelven atractivas y seductoras para los nuevos clientes. El proponer bonos de depósito de hasta la mitad de tu primera inversión para cualquier juego de manera inmediata y sin ningún tipo de registro adicional, es un premio muy significativo para todo aquel deseoso de obtener capital y desplazarlo a juegos de mesa, apuestas o cualquiera de los servicios que considere oportuno.