"No puedo estar en manifestaciones pero sí puedo escribir": América Pina Palacios
La escritora América Pina aborda las violencias contra las mujeres en sus obras el 'Sueño que no soñé' y 'Voces en cascadas'
América Pina Palacios es de Ciudad de México pero vive hace 55 años en Cajeme
La escritora y docente jubilada América Pina Palacios muestra su libro más reciente 'Voces en cascada'
Ciudad Obregón, Sonora.-Golpes, insultos, “palabras que suenan dulces en apariencia” pero que en realidad ofenden, acciones que discriminan y humillan, son los diferentes tipos de violencia en contra de las mujeres que América Pina Palacios describe en sus dos obras El sueño que no soñé y la más reciente Voces en cascada.
Este Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, que tiene como origen el asesinato de las activistas y hermanas Mirabal, a manos de Rafael Trujillo en República Dominicana, así como las diversas acciones pactadas en la Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer, fue declarado por la ONU en el 2000 para hacer un llamado a los gobiernos y organizaciones internacionales a prevenir, atender y erradicar la violencia contra las mujeres y las niñas, considerada una pandemia mundial.
La escritora América Pina Palacios es originaria de Ciudad de México pero radica desde hace unos 55 años en Ciudad Obregón, por su primera novela ‘El sueño que no soñé’ (2016), que trata sobre la historia de una mujer que migra a Estados Unidos y que además es víctima de violencia de género, fue invitada por activistas por los derechos de las mujeres y las niñas a diversas acciones de concientización. En su libro más reciente ‘Voces en cascada’ (2019), el cual no ha tenido difusión por la pandemia, aborda también el tema a través de 10 textos que llevan el nombre de una mujer.
La también coordinadora de Poetas Narradores, agrupación de escritores, explica que Voces en cascada se compone de 10 historias de mujeres que retratan la violencia de género pero también las formas de discriminación que son usuales en México.
Son (historias) muy típicas de nuestro país y nos indica no solo el golpe, el insulto, sino la forma sutil de controlarnos y de humillarnos a veces con palabras que suenan dulces en apariencia pero que en realidad nos están ofendiendo, entonces ahí nos enseña a identificar muchas formas de violencia contra la mujer y no permitirlas”, expresa la también docente.
Para escribir estos textos se basó en historias reales, pero las mezcló con elementos de ficción.
Yo ya fui muy revolucionaria en mi época de estudiante en la nacional de maestros pero ahora ya no puedo estar en manifestaciones y cosas por el estilo pero sí puedo escribir”, expresa América muy orgullosa de poder brindar con sus letras la posibilidad de una vida libre de violencia.
Su primera novela corta la publicó en el 2016, basada en el testimonio de una amiga que nació en Guerrero y se fue a Estados Unidos en busca de una mejor calidad de vida, pero que sufrió violencia familiar y discriminación por su condición de migrante a lo largo de su vida.
Así como en diversos textos que ha publicado en las más de 26 antologías, el tema recurrente son las diferentes formas de violencias que vivieron, la migración.
Esta amiguita a mí me tenía impactada porque me decía que fue rechazada por su mamá, que ella no sabía que no era su pá y entonces cuando me lo platicaba decía: ‘caray yo pensaba que mi situación era muy triste’, porque mis papás murieron cuando yo era muy pequeña y su historia se me hacía triste al máximo. Ella me pidió ‘por favor escribe mi vida, la titulas: siempreviva’ y le dije que no se me hacía de canción arrabalera, cada vez que viajaba la visitaba a San José, platicábamos y me venía y empezaba a escribir y a llorar”, comparte la escritora.
En el tema es recurrente en las diversas antologías en las que ha participado con cuentos, pero también hace poesía y recomienda a la gente participar en talleres literarios, ya que fue en el Taller Literario Después del Café donde el maestro y escritor Juan Diego González le ponía ejercicios con los que ella desarrollaba nuevas formas y figuras literarias.
Al leer poesía y querer interpretar a un poeta, tú puedes sentirte en otra dimensión”, expresa.
'Voces en cascada' (2019)
Fragmento
VII.-Doña Margarita
Fragmento
Doña Mago ya no estaba tan fuerte como antes, por eso solo ponía a cuajar la leche y hacía los quesos cuando estaba lista, a veces también el requesón, y vigilaba que sus hijas hicieran todo lo demás: la Maguito chica, ordeñaba; la Male, hacía el desayuno que los hombres tomarían a las siete de la mañana, después de una jornada de dos o tres horas; Raquel, hacía las tortillas, de harina o de maíz según el guisado; y así las cinco hijas tenían sus deberes, menos la más chica que iba a la escuela, aunque el papá don Toño, ya había amenazado con sacarla para ponerla también al trabajo, que según él, debían aprender todas las mujeres, ¿para qué escuela? si al fin, todas iban a terminar en la cama con un hombre porque a todas se les notaba ya lo “calientes”.
Viejo grosero, no respetaba a sus hijas, las trataba de putas y algunas otras cosas, aunque creo que eso de putas era lo peor, y a los hijos peor que si fueran peones.
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