Bremen, Alemania.- El futuro del Werder Bremen en la Bundesliga quedó comprometido, tras empatar sin goles ante el Heidenheim de la Segunda División, en el partido de ida de una promoción.
Bremen, que finalizó en el antepenúltimo puesto de la máxima categoría, tendrá que arreglárselas sin su capitán Niklas Moisander para la vuelta que se disputará el lunes, en casa del Heidenheim. Moisander fue expulsado en las postrimerías del encuentro, al recibir una segunda tarjeta amarilla por una falta.
Los dirigidos por Florian Kohfeldt tienen al menos el consuelo de no haber recibido un tanto en los descuentos, cuando el zaguero Timo Beerman realizó un cabezazo apenas desviado, tras un saque de esquina ejecutado por Marc Schnatterer.
Fue lo más cerca que cualquiera de los dos conjuntos estuvo de anotar en un partido de escasas aproximaciones, disputado bajo una lluvia intensa.