San Francisco, Estados Unidos.- La delantera de la selección de Zambia y quien jugaba para el Madrid CFF de la Liga F de España, Racheal Kundananji, se convirtió en el fichaje más caro en la historia del futbol femenil luego de ser traspasada al Bay FC de la National Women Soccer League (NWSL) de Estados Unidos, superando al de la colombiana Mayra Ramírez quien hace poco tenía el récord al ser fichada por Chelsea.
De acuerdo con cifras manejadas por la prensa española, Kundananji pasó al futbol estadounidense por 734 mil euros más un bonus de 70 mil dólares. Con estos números supera el fichaje de Mayra Ramírez que pasó del Levante, también de España, al Chelsea de Inglaterra por 450 mil euros. El equipo estadounidense informó que la delantera zambiana firmó hasta 2027 con opción para quedarse hasta 2028.
De esta manera, la nueva franquicia de la NWSL en donde milita la mexicana Scarlett Camberos, espera poder competir en su primera temporada contra los clubes de mayor experiencia. Tras el fichaje, la gerente general del equipo, Lucy Rushton, se mostró complacida por la llegada de la jugadora quien se incorporará tras recibir su transfer internacional que le permitirá unirse a la pretemporada del equipo.
"Estamos encantados de incorporar a Racheal a nuestro grupo. Ella es un talento tremendo con cualidades dinámicas de ataque y un perfil físico increíble que ha producido tanto para el club como para el país. Racheal tiene compostura de cara a la portería y una habilidad natural para anotar con diferentes tipos de remates y desde varios lugares", mencionó la dirigente en el comunicado en donde informaron sobre el fichaje del club.
"Creemos que seguirá creciendo y desarrollándose en nuestro club, mostrando sus habilidades y sumándose a la variedad de talentos ofensivos interesantes que tenemos aquí”, agregó Rushton. La capacidad goleadora de Kundananji quedó demostrada desde sus primeras temporadas en España, primero con Eibar y después con el Madrid donde registró 25 goles en su primera temporada y actualmente llevaba ocho tantos.
Fuente: Tribuna