Ciudad de México.- La primera carrera internacional de la Nascar Cup Series de la era moderna tiene que ver con los globos oculares, específicamente con los nuevos fanáticos en el mercado de la Ciudad de México. Nascar estará en la pista el viernes para el primero de tres días de carreras en el Autódromo Hermanos Rodríguez, una de las paradas más populares en el calendario de la Fórmula 1 y el proyecto más reciente de Ben Kennedy.
Bisnieto del fundador de Nascar, Bill France Sr., Kennedy ha llevado el negocio familiar más allá de sus cómodos confines en el pasado.
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En 2022, Kennedy trasladó la exhibición de pretemporada Clash de su hogar de toda la vida en el Daytona International Speedway en Florida a una pista temporal construida dentro del Los Angeles Memorial Coliseum. Este año, Kennedy trasladó el Clash a The Madhouse, el histórico estadio Bowman Gray, que había sido sede por última vez de una carrera de la Copa en 1971, en Winston-Salem, Carolina del Norte.
Nascar bajo Kennedy también regresó al North Wilkesboro Speedway en Carolina del Norte por primera vez desde 1977, cuando la carrera All-Star se trasladó allí hace tres años. Permitió la tierra en el Bristol Motor Speedway, un autódromo híbrido y óvalo en el Charlotte Motor Speedway, junto con su mayor empresa: la primera carrera callejera de Nascar, celebrada en el centro de Chicago.
Destino México
También tenía los ojos puestos en expandirse internacionalmente, lo que llegará el domingo con la primera carrera internacional que paga puntos en la Cup Series desde 1958. Es apenas la tercera vez en 77 años que la serie principal de Nascar correrá un evento que cuenta en el campeonato fuera de los Estados Unidos. Las dos últimas veces fueron en Canadá; la Cup Series también ha realizado exhibiciones en Japón y Australia.
“Nuestra mayor oportunidad de crecer como deporte es internacional”, dijo Kennedy cuando anunció que la Ciudad de México reemplazaría una de las dos carreras en el calendario asignadas al Richmond International Raceway.
“Estados Unidos siempre va a ser nuestro pilar y nuestra próxima oportunidad era expandirnos internacionalmente”, dijo. “Dijimos que queríamos hacer esto durante mucho tiempo, pero también necesitábamos asegurarnos de que fuera el momento adecuado, los socios adecuados y el lugar adecuado. La Ciudad de México cumplió con todos los requisitos. Estar en una de las ciudades más grandes del mundo, con más de 20 millones de personas que viven en ella, es una gran oportunidad para nosotros de llevar el deporte”.
Suárez en su casa
El fin de semana incluye la Xfinity Series de segundo nivel y la Nascar Mexico Series. Es un fuerte regreso a un mercado que devora todo el paquete de entradas de fin de semana de F1 a una hora de que estén disponibles.
Los mexicanos han demostrado ser fanáticos del automovilismo, pero no han tenido la oportunidad de ver a los grandes nombres de Nascar desde 2008, el último año de una racha de cuatro años de carreras de Xfinity. Kyle Busch, Denny Hamlin y Martin Truex Jr. fueron ganadores durante el período de cuatro años.
Daniel Suárez, el ex campeón de Xfinity y nativo de Monterrey, es la cara del evento de Nascar. Corrió el circuito 13 veces con un diseño diferente en la Nascar México Series, y tres de las salidas de Suárez fueron victorias.
“Estoy muy emocionado por el evento. Estoy súper emocionado de vivir el momento porque la primera vez solo va a suceder una vez”, dijo Suárez. “Realmente estoy tratando de estar lo más presente posible, disfrutar el momento y tratar de ejecutar el mejor fin de semana posible que podamos. Sabemos que somos capaces de ganar la carrera, pero ese no es el objetivo. El objetivo es la ejecución de todo el fin de semana, y ojalá la victoria sea el resultado de la parte de ejecución”.
Mucho por hacer
La planificación que se ha llevado a cabo en la Ciudad de México, uno de los 38 eventos en el calendario de la Copa, comenzó hace aproximadamente un año. Nascar ha trabajado en innumerables detalles, comenzando con cómo llevar casi 200 camiones que transportan autos de carrera y equipos desde el Michigan International Speedway hasta la Ciudad de México.
El oficial de Nascar, Tom Bryant, ha encabezado la logística organizacional y ha realizado múltiples viajes al cruce fronterizo en Laredo, Texas, para reunirse con funcionarios de aduanas de ambas naciones.
El viaje de Michigan a la Ciudad de México es de unas 40 horas, sin incluir el tedioso cruce de aduanas, donde todo el equipo y las herramientas de cada camión de Nascar deben documentarse en un manifiesto exhaustivo. Los autos de los equipos de la Cup Series estaban programados para llegar el lunes por la noche a Laredo, con el cruce programado para el martes y la llegada a la pista el jueves.
Fuente: Tribuna