Ciudad de México.- La administración de Andrés Manuel López Obrador está envuelta de nueva cuenta en un escándalo de corrupción, luego de que se descubriera que su consejero jurídico, Julio Scherer Ibarra, no declaró dentro de su patrimonio un departamento de 1.7 millones de dólares en una de las zonas más lujosas de Nueva York.
Dentro de su declaración patrimonial, la cual presenta ante la Secretaría de la Función Pública desde que asumió como consejero jurídico, Scherer omitió este departamento ubicado en Upper East Side de Manhattan, el cual adquirió en 2014 por un monto de 1.7 millones de dólares es decir, cerca de los 40 millones de pesos.
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El departamento está ubicado en el número 530 de Park Avenue en Manhattan, Nueva York, a cuadra y media del Central Park, a una cuadra de la Quinta Avenida y a nueve minutos caminando de la Torre Trump.
A pesar de que el presidente de la República se jacta de vencer a la corrupción que imperaba en viejas administraciones, otros de sus funcionarios, como el caso de Olga Sánchez Cordero y Javier Jiménez Espriú fueron exhibidos al no declarar sus departamentos de Texas en sus declaraciones.
Con información de El Universal