Ciudad de México.- Magdalena Aguilar Romero, de 28 años de edad, era una joven nutricionista que trabajaba en un centro médico, tenía dos hijos y a su exesposo, César Gómez Arciniega.
Tras su divorcio, acordaron que compartirían la custodia de los menores, pues ya no vivían juntos, sin embargo, ambos habitaban en Taxco, Guerrero. El día 13 de enero de 2018, Magdalena iba a ir junto con su mamá a la iglesia, habían quedado en verse a las 5:30 pues planeaba recoger a sus hijos de la casa de César Gómez.
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Su madre al ver que su hija no aparecía, inició a marcarle por celular, pero todo fue en vano pues jamás le contestó. La familia de la joven inició a hacer una gran búsqueda por que había desaparecido, la mamá de César con quien vivía comentó que su exnuera si había ido al domicilio en el centro de Taxco, pero se fue sin sus hijos.
A los 9 días después de que nadie viera de nuevo a Magdalena, sus familiares y más personas decidieron hacer una manifestación para exigir su búsqueda a las autoridades, quienes fueron al negocio de la expareja, donde hicieron un macabro hallazgo en una parrilla de tres quemadores.
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Ahí se encontraba una olla de peltre con los brazos y piernas cocidos de la víctima, una bolsa de plástico negra que contenía la pelvis, el resto de su cuerpo estaba dentro de un refrigerador.
os restos de la mujer fueron llevados al Servicio Médico Forense (SEMEFO) del municipio de Iguala al norte de Guerrero. César Gómez fue declarado responsable de los hechos ante La Fiscalía General del Estado (FGE) donde podría estar 40 años de prisión, pero el culpable se encuentra prófugo de la justicia hasta hoy.
Fuente: YoutTube XHKG TV Nayarit