Ciudad de México.- Ricardo Salinas Pliego, dueño de TV Azteca, Elektra, Total Play, entre otras empresas, es conocido por su personalidad polémica y de constante enfrentamiento con quien ose criticarlo o cuestionarlo, y ha tenido entre sus historias, duelos incluso con la administración de Andrés Manuel López Obrador.
Pero uno de los momentos que más a ejemplificado esa oscura y confrontativa personalidad ocurrió la madrugada del 27 de diciembre de 2002, cuando un comando armado enviado por Ricardo Salinas Pliego, secuestró las antenas de transmisión de CNI Canal 40, las que se ubicaban en el Cerro del Chiquihuite, de ahí el nombre ‘Chiquihuitazo.
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De acuerdo con los vigilantes e ingenieros, fue cerca de las 02:00 horas de la mañana cuando un convoy de camionetas comienza a subir el Cerro del Chiquihuite, y de los vehículos descendieron hombres encapuchados que los amedrentan con armas y los esposan violentamente.
Esta acción emprendida por Ricardo Salinas Pliego, que dio origen a la expansión de TV Azteca, ocurrió porque Javier Moreno Valle, entonces dueño de CNI Canal 40, se había asociado con el empresario regiomontano, para transmitir el contenido de Azteca.
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Sin embargo, Moreno Valle decidió terminar el acuerdo de manera unilateral, dejó de transmitir el contenido de Azteca, que fue lo que detonó la molestia de Salinas Pliego, y la posterior toma por la fuerza de las antenas transmisoras en el Cerro del Chiquihuite.
Fuente: Wikipedia