Ciudad de México. - En medio de una creciente controversia sobre la privacidad y la seguridad de los datos personales en el ámbito político, la candidata presidencial Xóchitl Gálvez Ruiz se encuentra entre las últimas víctimas de la filtración de su número de teléfono celular en redes sociales. Este incidente se suma a una serie de filtraciones que afectan a políticos de diferentes partidos, incluidos familiares del presidente y destacados miembros de Morena.
La controversia estalló después de que el presidente López Obrador involuntariamente filtrara los datos personales de una periodista durante una conferencia de prensa. Este incidente desencadenó una serie de filtraciones similares que afectaron a figuras políticas de alto perfil, incluida Xóchitl Gálvez Ruiz.
Según informes, un usuario de redes sociales identificado como "La Catrina Norteña" fue señalado como el responsable de difundir el número de teléfono celular de Xóchitl Gálvez. Aunque el autor de la publicación eliminó su contenido posteriormente, se argumentó que la candidata presidencial había compartido voluntariamente su número para estar en contacto con la sociedad.
La filtración de datos personales ha generado un debate sobre la responsabilidad y las consecuencias legales de tales acciones. Xóchitl Gálvez Ruiz, en respuesta a la situación, expresó que las filtraciones de datos personales deben ser castigadas de acuerdo con la ley, enfatizando que ni el proyecto político ni la autoridad moral deben estar por encima de los derechos individuales.
La senadora Lilly Téllez, por su parte, acusó en sus redes sociales que el perfil "La Catrina Norteña" es administrado supuestamente por una colaboradora que aparece en la nómina de Claudia Sheinbaum, candidata presidencial de Sigamos Haciendo Historia. Según la denuncia de Téllez, la persona detrás de este perfil es una asesora legislativa con un salario mensual específico.
Este incidente subraya la importancia de proteger la privacidad y la seguridad de los datos personales en el ámbito político, así como la necesidad de aplicar medidas legales para castigar las filtraciones de información personal. La polémica continúa en medio de llamados a una mayor transparencia y responsabilidad en el manejo de datos sensibles en línea.
Fuente: Tribuna