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Osiek, Polonia.- Un criador de cerdos ha sido comido por sus propios cerdos, temen los detectives, después de que desapareció dejando nada más que huesos en su patio.
El hombre tenía poco más de setenta años y vivía solo en su granja en Osiek, Polonia.
Sus animales no estaban encerrados en una pocilga, sino que caminaban libremente por su propiedad.
Se cree que fue devorado en algún momento entre la víspera de Año Nuevo y el miércoles 8 de enero, informa el periódico Gazeta Wroclawska.
Magdalena Serafín, la fiscal del distrito circundante, le dijo a Gazeta que el hombre fue visto con vida por última vez el martes 31 de diciembre.
En ese momento, estaba recogiendo agua de un pozo, y fue allí donde un vecino descubrió los huesos el 8 de enero.