Washington D.C., Estados Unidos.- "Es hora de llamarlos (a los narcotraficantes) por su nombre: terroristas", dice el congresista estadounidense Anthony Brindisi.
Y es que tanto en el Senado como en la Cámara de Representantes de Estados Unidos hay propuestas para modificar la Ley de Inmigración y Nacionalidad.
Al parecer la etiqueta de terrorista sigue pendiendo sobre la cabeza de los cárteles mexicanos de la droga.
Esto a pesar de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, desestimó a principios de diciembre declarar a las organizaciones del narco como terroristas.
El plan fue revivido por un nutrido e influyente grupo de legisladores republicanos y demócratas, que mantienen como meta sumar al crimen organizado mexicano a la lista de extremistas del Departamento de Estado.
Con diferencia de una semana, dos iniciativas de reforma fueron presentadas en Washington por legisladores de ambos partidos con el objetivo de que "ciertos cárteles del narcotráfico mexicanos" sean etiquetados como grupos terroristas.
La primera se presentó ante el Senado el 12 de diciembre con el respaldo de 10 senadores y la segunda fue ante la Cámara de Representantes, el 19 del mismo mes.