Río de Janeiro, Brasil.- Los padres de un bebé de seis meses han sido acusados de su asesinato después de presuntamente confesar haber desmembrado al niño antes de arrojar las partes cortadas a un pozo.
Tiago Lacerda, de 23 años, y Raquel Dias, de 25, comparecieron ante el tribunal el martes en Tabaporã, en el centro oeste de Brasil, después de salir corriendo.
Fueron atrapados a unas 700 millas de distancia de su hogar después de esconderse en otro estado.
Lacreda, que no era el padre biológico, afirmó que la niña murió por accidente después de recibir un medicamento para un resfriado, informa la policía, y al no saber qué hacer, escondió el cuerpo.
La madre, quien asegura que no estaba en la propiedad cuando murió su hija, alega que cuando llegó, la menor ya había sido cortada y arrojada al pozo.