South Yorkshire, Inglaterra.- En un intento desesperado de salvar a su amigo, Sam Haycock, de 16 años, murió ahogado en el embalse Ulley. La Policía rescató su cuerpo la tarde del 27 de mayo.
Aquel día, Sam y otros tres amigos pasaban el tiempo para celebrar que habían terminado su último día de secundaria. En algún punto, uno de sus amigos cayó al agua.
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Sam, quien no sabe nadar, saltó junto a otros dos amigos para salvar al adolescente que había caído al agua. En ese momento, los menores llamaron a la Policía para pedir auxilio.
Theresa Glenn, una madre de familia, relató los hechos y consideró al niño como un héroe que había arriesgado su vida para salvar a su amigo. Algo típico en él, pues solía ser un niño dispuesto a ayudar a cualquier persona en peligro.
Obviamente, es absolutamente triste lo que pasó, pero Gaynor (madre de Sam) está orgullosa de lo que intentó hacer y apreciará ese detalle por el resto de su vida", dijo.
Glenn lanzó una campaña en GoFoundMe con permiso de los padres de Sam para recaudar fondos para para ayudar a la familia en estos momentos de dificultad.
Fuente: Yorkshire Post