Maine, Estados Unidos.- Una madre de familia fue puesta tras las rejas por la muerte de su hijo de 3 años, a quien le colocó tatuajes permanentes para camuflar los moretones y heridas que tenía en el cuerpo.
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Jessica Trefethen, también conocida con los apellidos Johnson y Williams, fue arrestada esta semana por el fallecimiento de su pequeño Maddox Williams.
El reporte policial precisó que Jessica y su madre Sherry Johnson llevaron al menor a un hospital con severas heridas. Al poco tiempo perdió la vida.
Madre e hija dijeron que el niño había sido noqueado por un perro y pateado por su hermana de 8 años de edad. No obstante, la autopsia reveló un panorama diferente al descrito.
La causa de muerte se determinó como múltiples heridas contundentes y se detalló que su fallecimiento fue por "traumatismos infligidos no por accidente".
El cuerpo de Maddox estaba repleto de raspones, y golpes en las piernas, abdomen y cabeza. En el rostro tenía algunas heridas sanadas que habían sido cubiertas por tatuajes temporales.
El pequeño tenía sangrado interno en el abdomen, lo que indicaba la ruptura del intestino, sangrado cerebral y fractura de la espina. Una radiografía también evidencio que le faltaban tres dientes.
Fuente: WCSH