Belfast, Irlanda del Norte.- El pasado martes, 31 de agosto, Heather Maddern, de 55 años, perdió la vida por complicaciones de Covid-19, cerca de tres semanas después, su hija, de 32, también falleció a causa de la misma enfermedad. Ambas eran grandes aficionadas de las teorías de conspiración.
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De acuerdo con algunos informes, los hechos ocurrieron en un hospital, ubicado a las a fueras de Belfast, Irlanda del Norte. Primero arribó Heather, posteriormente Sammie-Jo Forde, su hija, arribó a la misma sala de su madre, de hecho las ubicaron a dos camas de distancia.
Ambas eran grandes seguidoras de las teorías conspirativas del Covid-19, principalmente de una influencer, de Estados Unidos, llamada Candace Owens, quien utiliza las redes sociales para propagar información negativa contra las inoculaciones, por lo que rechazaron la vacuna cuando llegó el momento de recibirla.
Kevin McAllister, expareja de Heather y padre de Sammie-Jo Forde declaró ante los medios locales que ambas eran muy unidas, por lo que solían compartir todo en sus vidas:
Trabajaron juntas, vivieron juntas y murieron juntas.
Fuentes: RT