Ohio, Estados Unidos.- El pasado lunes, 27 de junio, la policía de Ohio, baleó a un hombre afroamericano, de 25 años, identificado como Jayland Walker. De acuerdo con las primeras indagatorias, liberadas por la policía, la víctima tenía alrededor de 60 heridas por arma de fuego, pero se estima que las autoridades habrían disparado más de 90 veces en su contra. Según los uniformados, que se encontraban en el lugar de los hechos, el ahora occiso fue perseguido porque presuntamente violó una ley de transito.
Los hechos ocurrieron en horas de la noche de la semana pasada, en DoorDash. Según las primeras declaraciones, la policía habría comenzado a perseguir para ponerle una infracción de tráfico y vehículos, misma que hasta el momento no ha sido especificada por las autoridades involucradas. Supuestamente, los agentes le habrían pedido que se detuviera, pero no lo hizo, incluso aseguran que comenzó a disparar desde el interior de su automóvil mientras era perseguido.
Créditos: Internet
Finalmente, la víctima salió del vehículo mientras utilizaba un pasamontañas e intentó escapar corriendo de la policía, esto según información proporcionada por los videos tomados por los agentes policíacos. En determinado momento, Jayland se giró ante los policías, quienes, presuntamente, se prepararon por sí acaso el ahora occiso les disparaba, razón por la que habrían abierto fuego en contra del agraviado.
Para este domingo, 3 de julio, el jefe de la policía de Akron, Steve Mylett, reconoció que, en el momento del ataque armado, la víctima se encontraba desarmada, hecho que no impidió a las autoridades disparar en su contra más de 90 veces, tal y como se había mencionado anteriormente, 60 de aquellos disparos impactaron en la víctima. Hasta el momento, Mylett se ha negado a revelar sí se trataba de un tiroteo justificado. Cabe señalar que el médico forense que asistió al lugar declaró que encontró a la víctima esposada y boca abajo, escena muy diferente a la que los policías describieron en sus testimonios.
Fuentes: Tribuna