Nueva York, Estados Unidos.- Este fin de semana, la comunidad estadounidense, en especial los residentes de Nueva York, se sorprendieron con la muerte de un menor de tres años de edad quien, al estar al interior de su departamento, ubicado el piso 29, cayó por la ventana al vació y perdió la vida, lo que de in mediato genero una intensa movilización entre los cuerpos de emergencia quienes ya no pudieron hacer nada para salvarlo.
De acuerdo con los primeros reportes, elementos de la Policía de la denominada 'Gran manzana', recibieron el reporte del accidente el sábado 2 de julio cerca de las 11:09 horas y, tras llegar al edificio ubicado en ella complejo residencial Taino Towers, en Harlem, el menor yacía gravemente herido en el andamio del piso tres, por lo que d inmediato fue rescatado y llevado a un hospital donde fue declarado muerto, razón por la que se abrió una carpeta de investigación para deslindar responsabilidad.
"Creemos que el niño salió por una ventana, pero seguimos investigando cómo fue exactamente que ocurrió esto", reveló la policía.
Según informaron las autoridades, las leyes de la ciudad de Nueva York estipulan que aquellos departamentos ubicados en la parte más alta de los edificios residenciales deberán tener protecciones en caso que ahí resida un menor de 10 años o menos, por lo que será motivo de una investigación más a fondo para conocer si el departamento en cuestión contaba con todas las protecciones con apego a la ley y, en caso de ser así, saber la razón por la que el infante las violó hasta derivar en este accidente.
Vecinos ubicados en dicho residencial destacaron que la madre del menor, de quien se desconoce si está en calidad de detenida o no, comenzó a gritar desesperada al ver que el niño estaba en el balcón e incluso, había logrado llegar hasta el andamio, algo por lo que los mismos vecinos se alarmaron y comenzaron a averiguar qué sucedía; no obstante, al descubrir las razones ya era tarde pues el pequeño había resbalado y caído al vacío.
"Oímos un gran ruido. Mi hijo que estaba aquí corrió hacia el frente. Subió corriendo al andamio para encontrar al bebé. El bebé seguía llorando y respirando cuando él llegó. Cuando los paramédicos lo bajaron, tenían una toalla sobre su cara", declaró una vecina quien dijo residir en el piso 34 del mismo inmueble.
La policía alertó que la investigación se mantiene abierta y en los siguientes días se emitirá un reporte más detallado para no solo revelar a la ciudadanía qué fue lo que sucedió, sino también que este acontecimiento lamentable sirva como ejemplo para evitar la repetición de los hechos pues como se mencionó anteriormente, por ley los edificios de gran altura deben tener la protección adecuada para evitar accidentes.
Fuente: Tribuna