OPINIÓN

Los productores del campo ya le vieron las orejas al lobo y se declaran en pie de lucha

Rumbos

Mario Rivas, columnista.
Escrito en OPINIÓN el

EN UNA ENTREVISTA TELEFÓNICA (en estos tiempos de pandemia no hay de otra) el presidente del Consejo Nacional Agropecuario, BOSCO DE LA VEGA, hizo ante el periodista LUIS CÁRDENAS, una interesante y muy ilustrativa exposición sobre la inminente modificación del Artículo 27 que fue reformado en 1992, en el cuarto año de CARLOS SALINAS, justamente para darle certeza jurídica al sector agroalimentario y de los propios campesinos, es decir, ejidatarios, colonos colectivos, que así había dejado LUIS ECHEVERRÍA su reparto agrario que fue todo un desastre.

Bosco de la Vega, objeta un término que la propuesta reformista intenta meter en la nueva ley: “propiedad social”.

“No es necesaria esta modificación porque abre la puerta a leyes secundarias que podrían ser aplicadas discrecionalmente cuando haya una extensión más allá de las 100 hectáreas que limita la propiedad privada”.

El dirigente de los agricultores privados -o particulares- le está mirando las orejas al lobo.

Es evidente que los chairos que operan a espaldas del gabinete, han logrado insertar en las cámaras legislativas la semilla de la tentación expropiadora.

Pero, momento, señor mío: no sería una expropiación como la de 1976, que fue un caballazo del poder presidencial. Bosco de la Vega no lo dijo así, pero quedó implícito en su exposición: en las leyes secundarias está la clave. Las extensiones territoriales que rebasen las 100 hectáreas serán devueltas a su dueño original: el Estado.

En otras palabras: sería una expropiación hormiga. Más o menos en este tenor se encauza la lucha que cientos de productores del sur de Sonora han iniciado. Hasta donde alcanzo a percibir, se trata de un movimiento justo, con soportes legales muy definidos y, principalmente, que avanza muy a tiempo. Hay que decirlo, dilecto amigo: nada es fortuito cuando el Gobierno tiene metidas las manos en una decisión oficial.

Tengo, para mí, que los productores de Sonora, ya comprendieron que el Gobierno de la Cuarta Transformación, simplemente no quiere nada con el sector privado del campo.

Las cosas como son.

Desde el inicio del sexenio, el Valle del Yaqui ha sido minimizado, primero, con anuncios falsos de que la Secretaría de Agricultura tendría su base en Cajeme.

Ya se cumplieron dos años de los augurios: no ha habido voluntad de sostener los apoyos a la producción del campo. Y peor tantito. El Gobierno de ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR autorizó recortes significativos a los estados, dejando al campo en la indefensión.

Y ahora al reformado Artículo 27 que en 1992 Salinas ordenó se modificara para acabar de una buena vez con los repartos de tierra.

O sea, que todo apunta hacia un remalazo al estilo Echeverría pero con diferentes aplicaciones. Si no, ¿para qué incluir en la nueva Ley el término “propiedad social”?

He ahí el detalle.

Hasta donde estoy enterado, Bosco es un hombre inteligente. Está siendo cauto para no echar a perder alguna eventual negociación. Pero a las claras se nota que no guarda muchas expectativas. Algo está podrido en Dinamarca.

No sé usted, pero yo tengo la impresión de que el verdadero rostro de la llamada cuatroté apenas está empezando. Analistas de toda jaez coinciden que hay cierta desesperación en el gabinete cercano al presidente. AMLO no se muestra interesado en el apoyo de las clases medias y altas.

En realidad, sabe que no cuenta con ellas. Lo ha dicho públicamente, su base está en los de abajo. Y por ellos está dispuesto a exprimir hasta el último peso que tengan las arcas del Gobierno.

Está convencido de que cuenta con la fidelidad de los adultos mayores, de los discapacitados, de los jóvenes emprendedores y, en general, de todos los mexicanos que reciben dinero en efectivo en mano propia.

Estos no le pueden fallar.

Pero los observadores, nacionales e internacionales, aseguran que lo que sí puede fallar es la liquidez económica. AMLO casi ha agotado las reservas legales del Gobierno y ahora va sobre las reservas del Banco de México.

Pero afirman los expertos que aún con las reservas en divisas del Banxico, no le alcanzará al presidente. Por eso en Palacio Nacional no hay interés en los problemas del campo. Ahí no hay votos. Ahí no hay aplausos. Ahí hay gente de trabajo que ha forjado un patrimonio sobrellevando el volátil ciclo climático que a veces se niega a dar y a veces da en abundancia.

Déjeme contarle que cuando atestigüé el remalazo de la expropiación agraria en noviembre de 1976, pensé que jamás, en lo que me quedaba de vida, volvería a experimentar esa zozobra que viví en aquellos meses, durante el agónico sexenio echeverriano.

Quizá sin la misma contundencia de hace 44 años, pero también ayer algo en mi interior me hizo ruido, cuando vi el encabezado en TRIBUNA de la nota correspondiente al posicionamiento de los productores agropecuarios.

Diré algo más con respecto a los síntomas de una enfermedad que se avecina: el expresidente de Uruguay, JOSÉ MUJICA, llamado en su tiempo el presidente pobre, de visita en México donde asistió al segundo informe de AMLO, dijo cosas muy interesantes y aleccionadoras en su encuentro con una reportera de Televisa.

Por cuestiones de espacio hoy me limitaré a citar unas cuantas líneas.

Ya mañana daré salida al resto.

Va: Le pregunta qué opinión le mereció el informe y dijo que mal tipo sería él si como invitado del Gobierno mexicano se pusiera a opinar.

--¿Conocía al presidente?— se le pregunta.

--No, yo no lo conocía.

--¿Cómo lo vio?

--Está intentando el cambio, espero que lo logre.

--¿Qué impresión le dio?

--Lo vi bien, contento, con ánimo, lo vi maravillosamente soñador.

Estas últimas líneas, deben ser cuidadosamente analizadas. En estas cuantas palabras está lo que verdaderamente quiso decir el filósofo JOSÉ MUJICA.

En fin.

DE AQUÍ, DE ALLÁ Y DE MÁS ALLÁ

Y A TODO ESTO, LECTOR, ¿SE ENTERÓ USTED que se oye el run run de que Morena estaría buscando tal vez cartas adicionales a las que ya se conocen, para fortalecer sus opciones llegada la hora de la decisión en Cajeme…?

Aquí mismo se ha dicho que JAVIER LAMARQUE CANO, ANDRÉS SALAS SÁNCHEZ y RAÚL (El Pollo) CASTELO, conformaban una terna que por circunstancias especiales estaría condenada al fracaso…

Y es que mientras Javier Lamarque estaría obligado a buscar la reelección como diputado federal, ‘El Pollo’ enfrentaría un serio obstáculo por sus acciones del pasado, cuando abanderó el movimiento empresarial de Hermosillo para salirse con la suya en el asunto del acueducto…

En este histórico contexto o escenario, Andrés Salas, que no tiene cola que le pisen, quedaría solo…

De ahí el rumor de que se están viendo otras opciones, y, para sorpresa de muchos, al parecer encontraron un cuadro que puede ser tomado en cuenta. Se llama JOSÉ CARLOS GALINDO GUTIÉ- RREZ y se desempeña como secretario de Desarrollo Urbano y Obras Públicas, y a quien se le acreditan dos maestrías, una en Harvard y la otra en Massachusetts… Quién sabe, esto dice el run run y, bueno, ya veremos…

Ya veremos…

MIENTRAS TANTO, LLEGA EL mensaje con los buenos saludos de ADALBERTO ANDUAGA, DENISSE FLORES, ALEXIS RAMÓN FAVIAN OSUNA, y JOSÉ RAMÓN FAVIAN CINCO, en cuyo grupo, destacan dos que pertenecen al grupo musical LOS SENTENCIADOS… Obviamente, los de apellidos Favian, son padre e hijo y además excelentes músicos, son docentes…

Con ellos mi hijo MARIO RIVAS GONZÁ- LEZ…

¡Larga vida para ellos!...

Y POR ÚLTIMO, A VER, A VER, ¿cómo estuvo eso de que los yaquis no le permitieron a la Guardia Nacional ingresar a territorio yaqui para garantizar la seguridad de los trabajadores del Conavi, uno de cuyos ingenieros, fue asesinado con ráfagas de metralleta en el tramo de terracería Cócorit-Tajimaroa, hace algunos días?...

Y los yaquis, empanicados ante la posibilidad de que una autoridad del calibre del Ejército pudiera descubrir algo raro por ahí, le cierran las puertas y se comprometen a darle seguridad a los empleados de la dependencia federal…

Es todo.

Le abrazo.

m.rivastribuna@gmial.com