Ciudad de México.- Desde el pasado viernes, elementos de la Guardia Nacional, personal del Ejército y de la Secretaría de Marina, se reunieron en la frontera sur de México, con el fin de recibir a seis mil migrantes centroamericanos que provienen de Honduras.
Con esta caravana se haría la primera oleada del año de indocumentados, por lo que han reforzado la seguridad con el fin de evitar que sean víctimas del crimen organizado.
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Por ello, el Gobierno ha desplegado cerca de 500 agentes migratorios hacia el sur de país con el fin de vigilar la frontera y evitar que entren en orden hacia México.
Se menciona que la Guardia Nacional se hará cargo del Puente Internacional Rodolfo Robles, mientras que otros grupos militares están a cargo de la ribera del río Suchiate.
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Cabe mencionar que también hay personal de la Secretaría de Salud, pues debido a la pandemia se tienen que prevenir los contagios, por lo que estarán obligando a que se sigan los protocolos sanitarios.