California Estados Unidos.- Aisha Nava Míreles, de solo 18 años, fue asesinada en el lugar que creía encontraría una mejor vida. La joven originaria de Ecatepec, Estado de México se fue a vivir a Estados Unidos a los 10 años y 8 años después, le quitaron la vida.
Aisha le pidió permiso a su madre, Natallie Mireles García, para ir a casa de su amiga. La joven, la mayor de tres hermanas, prometió que llegaría a las 20:00 horas de la noche, pero nunca regresó a casa.
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El pasado 29 de marzo, Aisha fue encontrada muerta debajo de un puente en Orange, California. Estaba golpeada y, según versiones, habría sido lanzada desde lo alto.
La madre de Aisha acudió con autoridades en Hawaiian Gardens, quienes le mostraron fotografías del cadáver de su hija para que la reconociera.
A los 10 años, la adolescente se unió a su madre en Estados Unidos. Natalie ya radicaba ahí cuando llegó Aisha porque quería buscar una mejor vida para la familia fuera de México; el famoso 'sueño americano'.
Autoridades aún no le han podido dar más detalles a la madre de la joven sobre su terrible muerte. Natallie continúa viviendo en el país vecino junto a sus dos hijas, pero al estar en condición de migrante indocumentada y no hablar inglés, cada vez está más lejos la idea de obtener justicia.
A través de la plataforma de donaciones GoFundMe, la familia pidió a la ciudadanía apoyo para poder darle sepultura a la adolescente, en la cual lograron reunir 23 mil dólares.
Fuente: Letra Roja y GoFundMe