SEGURIDAD

Madres Buscadoras de Sonora sufren atentando: "Déjanos buscar a nuestros desaparecidos"

Al verse en peligro por la escasa seguridad que llevaban, el grupo de mujeres publicó en redes sociales "acabamos de sufrir un atentado" y exigieron seguridad

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Santa Ana, Sonora.- Antes de que Madres Buscadoras de Sonora encontrara un crematorio clandestino, donde pudieran estar más de 50 personas calcinadas, el colectivo informó que fue víctima de un atentado en el municipio de Santa Ana.

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El hecho tuvo lugar poco antes de las 11:00 horas de este sábado, cuando Milagros Flores, líder del grupo Jóvenes Buscadores de Sonora, reveló que criminales les habían impedido el paso a un punto de búsqueda ubicado en medio del monte.

Los jóvenes originarios de Hermosillo, habían acudido al llamado de Madres Buscadoras de Sonora en Santa Ana, para ayudarles en un rastreo de campo donde tenían el reporte de dos personas sin vida sepultadas en fosas ilegales.

Una de las madres, iba por su hijo hacia el final de una pista clandestina, así se lo habían asegurado en un reporte anónimo. En el camino recibieron amenazas para que no avanzaran, luego desconocidos arrojaron ponchallantas sobre la terracería para evitar su paso.

Al verse en peligro por la escasa seguridad que llevaban, ya que por no contar con oficios de búsqueda, se les negó el resguardo de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal (AMIC), publicaron en sus redes "acabamos de sufrir un atentado" y exigieron seguridad.

Dejen que busquemos a nuestros desaparecidos nosotras no buscamos culpables ni justicia lo único que queremos es traerlos de vuelta a casa de donde nunca debieron salir. Con su muerte pagaron su deuda, déjanos buscar a nuestros desaparecidos", se lee.

Ceci Patricia Flores Armenta, líder de Madres Buscadoras de Sonora, dijo que no pueden esperar a que la autoridad actúe, pues por la lentitud y burocracia, los animales del monte se pueden comer los cuerpos y no encontrar nada.

Por fortuna, Flores Armenta, quien tiene a sus dos hijos extraviados, recibió llamadas del gobernador Alfonso Durazo y la secretaria de Seguridad Pública, María Dolores del Río, quienes les enviaron apoyo policial.

Octavio Grijalva, delegado de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en Sonora, se puso a disposición del colectivo y el alcalde de Santa Ana, Francisco Avechuco les envió bebidas hidratantes.

Fuente: El Universal