Navojoa, Sonora.- Avanzaban los primeros días del 2020, cuando los conflictos por el municipio saltaron a la luz, Sindicato de Oomapasn contra Gobierno, una lucha por la destitución de trabajadores y acusaciones hacia las autoridades municipales, manchando las primeras semanas del año.
Un año que se esperaba fuera de transición y de cambio para el municipio, se veía opacado por nuevos escándalos, considerado un conflicto personal entre Gobierno y trabajadores, los cuales exigían fuera respetado su contrato colectivo, manifestándose en repetidas ocasiones y con la intención de emplazarse a huelga.
El primer mes del 2020 no empezaba de la mejor manera, sumándosele una cadena de problemáticas, como el eterno problema de aguas negras, además del deterioro de vialidades que tomaba mayor popularidad, así como la controversia de la compra de equipo táctico para Seguridad Pública, la cual generó polémica por su excesivo costo.
Para el mes de febrero, la panorámica cambiaba de rumbo, con días más alentadores; el tema de seguridad se reforzaba, al anunciarse la donación de un terreno para la construcción del cuartel de la Guardia Nacional, obra que traería un avance para la ciudad, además de apoyos a organismos sociales como Bomberos, quien recibió donaciones. Sin embargo, el tema del juicio político crecía y los problemas de desabasto de agua contribuían a que las quejas hacia la actual administración se hicieran presentes; además de un grupo de sindicalizados de Oomapasn que no cedían en la lucha por defender sus derechos y ponían a la ciudad en el ojo del huracán a nivel nacional.
En marzo llegó sin duda lo que ha sido el peor episodio para los navojoenses, la llegada del Covid-19. Fue desde el 15 de marzo cuando sonaron las alertas, las cuales se venían anunciando desde semanas atrás, la llegada del ese entonces desconocido ‘coronavirus’; los primeros casos de la enfermedad se hacían presentes en el Estado, y el temor de parte de los ciudadanos aumentaba.
Crisis, desempleo, aislamiento social obligatorio, cierre de escuelas y momentos de temor, fue lo que se vivió durante ese mes, considerado el más duro para los ciudadanos, conviviendo con una pandemia y la incertidumbre de qué sucedería en las siguientes semanas.
Las medidas para proteger la salud de los miles de ciudadanos obligaba al sector comercio a un inminente cierre, dejando libres solamente a todos aquellos que desempeñaran actividades clasificadas como esenciales e inclusive, cortando el único ingreso con el que subsistían cientos de familias, quienes resintieron el duro golpe a su economía.
El primer trimestre de 2020 no fue el esperado para los más de 150 mil navojoenses, quienes desde el primer día del año esperaban fuera un ciclo histórico, mas no de tragedia y crisis, mucho menos con la presencia de una pandemia.