Joven intentó extorsionarlo por un millón de euros, según equipo legal de Alejandro Sanz

Ciudad de México.- Alejandro Sanz, quien ha sido envuelto por los medios, esto después de declaraciones de manera pública por la joven catalana, Ivet Playá, la cual aseguró que anteriormente mantuvo una relación con el famoso cantante; según el equipo legal del artista, la joven de actualmente 28 años se comunicó con la oficina del cantante para extorsionarle, a través de información que tenía de la relación.

Según la información que el medio español Artículo 14 dio, el vínculo entre los dos inició en el año 2015, en el cual Playá tendría 18 años. Según el relato de la catalana, era una fan del artista que en ese entonces tendría 49 años. Después de mantener varios contactos a través de redes sociales, obtuvo una entrevista académica a través de la comunicación con el equipo de Sanz.

Después de algún tiempo, en el 2019 se mudó a Madrid, donde estuvo en contacto por trabajo, principalmente en el manejo de redes sociales. En marzo del presente año, Ivet Playá se comunicó con la oficina del artista, esto para informar que tenía contenido del cantante, principalmente imágenes y audios de características sexuales que se compartieron a principios del 2024. De acuerdo a lo dicho, la joven propuso 'negociar' para no divulgar el material.

En mayo, el abogado R.A.O., integrante del bufete Roca Asociados, se comunicó formalmente con los representantes de Sanz. La propuesta: que el cantante invirtiera cerca de un millón de euros en tres proyectos: las firmas Jardineras Bayer e IPM Comunicación y la compra de un inmueble en Collbató. A cambio, el artista obtendría únicamente un 5% de participación. “Una inversión desproporcionada que se produce tras la advertencia del material íntimo”, explicaron los abogados de Sanz a Artículo 14.

Alejandro Sanz confirmó a través de redes sociales que tuvo una relación con Playà “como adultos libres” y expresó su pesar por cómo evolucionaron los hechos. Su equipo rechazó la propuesta de inversión y declaró que estudian acciones legales por un posible intento de extorsión. Por otro lado, los defensores legales de Ivet Playà niegan categóricamente cualquier forma de chantaje.

Uno de sus representantes aseguró al medio español: “Ella no pidió dinero a cambio de silencio. Si creen que hubo delito, que denuncien”. Playà afirma que su intención no es legal, sino moral, y que busca exponer conductas “emocional y éticamente inadmisibles”. El caso ha generado un amplio debate en redes sociales y medios internacionales sobre el consentimiento, el poder en las relaciones afectivas y la exposición pública de lo privado.

En un video que circula en plataformas digitales, Playà dijo sentirse “engañada, utilizada, humillada y sucia” y expresó su deseo de cerrar este capítulo hablando con su propia voz. Hasta el momento, no se ha presentado una denuncia formal ante la justicia, por lo que el conflicto se mantiene en el plano mediático, alimentado por declaraciones enfrentadas y opiniones divididas.

Fuente: Agencia