Inglaterra.- El caso de una mujer de Inglaterra ha causado enorme indignación, quien se atrevió a fingir que padecía de un grave cáncer terminal, para engañar a cientos de personas y pedir donativos, con el fin de gastar dicho dinero en la realización de la boda de sus sueños.
Se trata de Toni Standen de 29 años, la mujer fue detenida en Inglaterra tras inventar que padecía una enfermedad lo cual resultó ser totalmente falso, pero tal fue su afán por engañar a las personas y conseguir donativos, que Standen se rapó la cabeza para darle mayor credibilidad a su delicada condición.
Con el afán de conseguir mucho dinero para poder costear la boda de sus sueños, esta controversial mujer, se rapó la cabeza por completo y dijo que tenía un cáncer grave, el cual supuestamente se había extendido al cerebro, los huesos y que en realidad estaba en todas partes, tal fue el tamaño de su engaño que incluso dio varias entrevistas a medios de comunicación para que le ayudaran a pagar su boda, como un último deseo antes de morir.
Debido a esto la campaña de recaudación que emprendió acumuló un total de 8 mil 500 libras esterlinas, alrededor de 11 mil dólares; y con tal monto no solo se casó y cumplió su meta en 2019; sino que también usó el dinero para su luna de miel en Turquía, Alemania, República Checa, Austria, Hungría e Italia.
La treta estaba planeada en todo momento, tal fue así que en febrero pasado, hizo una publicación en su Facebook anunciando su muerte:
Toni falleció anoche, rodeada de amigos y familia, fuerte hasta el final", fue escrito en la cuenta personal de la mujer.
Las sospechas comenzaron cuando después de este mensaje, desmintió la información al decir que la hackearon, y posteriormente en abril dijo haber contraído el Covid-19, con lo que su mentira finalmente se vino abajo. Finalmente confesó:
Los amo todos, estoy agradecida por todo en los últimos dos años. Lo siento mucho por todo esto, estoy avergonzada y con el corazón roto y ahora mismo estoy luchando para reparar el daño".
Después de que se descubriera el engaño, fue obligada a permanecer detenida en el Tribunal de Magistrados de Chester con la finalidad de que devolviera el dinero a las personas que creyeron en su mentira.