Juneau, EU.- Una trabajadora de la salud en el Hospital Regional Bartlett en Juneau, Alaska, desarrolló una reacción alérgica grave poco después de recibir la vacuna de Pfizer contra el Covid-19 el martes por la noche y tuvo que ser hospitalizada.
Durante una conferencia de prensa este miércoles, los funcionarios de salud dijeron que la mujer de mediana edad no tenía antecedentes de alergias y nunca había experimentado anafilaxia, una reacción alérgica de gravedad y potencialmente mortal.
Los funcionarios del Hospital Regional Bartlett dijeron que los 96 trabajadores que recibieron la vacuna el martes fueron analizados durante 30 minutos después de la inyección. La mujer que comenzó a sentirse enrojecida unos 10 minutos después de ese período de observación, tomó Benadryl, un antihistamínico.
Sin embargo, sus síntomas progresaron a una frecuencia cardíaca elevada y dificultad para respirar, por lo que fue enviada al departamento de emergencias del hospital.
"Tenía un sarpullido rojo y sonrojado en la cara y el torso", dijo la Dra. Lindy Jones, la médica de emergencia que la trató, durante la sesión informativa del miércoles. "Estaba preocupada por una reacción anafiláctica". Jones le dio una inyección de emergencia de epinefrina.
Sus síntomas disminuyeron por un corto tiempo, pero luego reaparecieron. Le pusieron epinefrina intravenosa y la trasladaron a la unidad de cuidados intensivos del hospital, donde permaneció durante toda la noche. A partir del miércoles por la mañana, la mujer había dejado de tomar medicamentos y se esperaba que le dieran el alta ese mismo día por la noche.
Pfizer dijo en un comunicado que la compañía está "trabajando con las autoridades sanitarias locales para evaluar" la reacción que ocurrió en Alaska y que "supervisará de cerca todos los informes que sugieran reacciones alérgicas graves después de la vacunación y actualizará la información de la etiqueta si es necesario".
Este caso se convierte en primera y única reacción alérgica a la vacuna Pfizer-BioNTech reportada en los Estados Unidos hasta el momento, aunque especialistas temen que esto se replique en más pacientes que no necesariamente son alérgicos.