Tennessee, Estados Unidos.- A inicios de año, la humanidad cambió drásticamente todos sus hábitos y rutinas, después de que se anunciara la rápida propagación del virus Covid -19 y el mundo se viera envuelto en una pandemia; obligando así a millones de personas a aislarse y quedarse en confinamiento.
Sin embargo, el personal médico son quienes no cesan sus actividades y hasta se han visto saturados de trabajo debido a la crisis. Y una vez más, debido a descuidos de la sociedad, los contagios por coronavirus han aumentado y son ellos quienes poco a poco, se ven y sienten exhaustos ya que son médicos y enfermeros quienes se encuentran en la primera línea de acción para atender a quienes lleguen con síntomas por Covid-19.
Kathryn Ivey es una de las muchas enfermeras que han alzado la voz y han utilizado redes sociales para informar al mundo las terribles consecuencias y algunos estragos que la crisis sanitaria ha dejado en su físico.
El pasado noviembre, Ivey se vitalizó después de compartir una fotografía de su persona, desde la Unidad de Cuidados Intensivos de un hospital en Estados Unidos, con una muy emotiva descripción.
Amo ser una enfermera. No esperaba exactamente ser una nueve enfermera en medio de una pandemia altamente politizada, pero la vida te sorprende incluso en una pandemia. No hay nada más que quisiera hacer. Cuidar de los más enfermos es un honor y yo atesoro a mis pacientes", expresó.
En la primera fotografía, la enfermera luce increíblemente feliz y esta fue tomada en abril de 2020; mientras que en la segunda, la cual fue tomada ocho meses más tarde, Kathryn se ve casi irreconocible y con evidentes signos de cansancio y marcas en el rostro.
Por otro lado, en sus siguientes tuits, hace un pequeño pero muy valiente llamado a toda la comunidad para que sean conscientes de sus acciones y respeten las medidas sanitarias que las autoridades han publicado.
Es devastador ver gente morir siendo que esas muertes eran evitables y todavía más devastador cuando los veo morir de la misma forma, una y otra vez (…) COVID-19 es una enfermedad brutal y no se la desearía ni a mi peor enemigo. Por favor, entiendan que no se están protegiendo solo a ustedes mismos, sino están protegiendo a la gente a su alrededor", finalizó.