Los Ángeles, Estados Unidos.- El pasado fin de semana, del 3 de diciembre, se registró un intento de robo en el interior de un inmueble en Los Ángeles, California, en Estados Unidos, sitio en el que se reportó un enfrentamiento armado en el que falleció una persona; sin embargo, en un giro de los acontecimientos, la víctima fatal no fue otra persona que el propio ladrón; mientras tanto, los cómplices del ahora occiso escaparon del lugar.
Los hechos se registraron durante el pasado fin de semana, en una casa ubicada en Granada Hills, aproximadamente a las 17:00 horas, cuando un grupo de entre tres y cuatro personas, intentaron allanar un domicilio para cometer un asalto. De acuerdo con algunos informes, los criminales iban vestidos con ropas color negro y máscaras para no ser identificados; sin embargo, el domicilio no se encontraba vacío, ya que, en su interior albergaba al propietario de la casa, junto a una mujer de la tercera edad y el nieto de ésta.
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De acuerdo con información proporcionada por el Departamento de Policía de Los Ángeles, el dueño de la casa optó por defender su propiedad, por lo que sacó un arma de fuego con la que le disparó a uno de los ladrones, lo que desató un tiroteo en el interior del domicilio, pero luego de unos breves minutos, el propietario, cuyo nombre se mantiene bajo el anonimato, logró ahuyentar a los ladrones, quienes dejaron atrás un vehículo BMW color negro.
Más tarde, las víctimas se encargaron de llamar al número de emergencia para notificar el robo. Al sitio arribó un equipo de paramédicos que intentaron brindarle atención al baleado, pero éste ya no presentaba signos vitales. Cabe señalar que las autoridades consideran que un segundo ladrón resultó herido en la escena, puesto en el lugar encontraron rastros de sangre que no pertenecían a la víctima fatal. Por su parte, el dueño de la casa fue detenido y trasladado a la Comisaría de la Policía Comunitaria de Devonshire, donde fue interrogado, pero horas después fue liberado.
Cabe señalar que algunos vecinos de Granada Hills, que fueron entrevistados por los medios locales, denunciaron que la zona suele ser muy conflictiva e incluso aseguraron que diariamente se reportan robos, por lo que se alegraban de que, en esta ocasión, los asaltantes se hayan topado con pared y no hayan podido cometer el atraco: “Estamos hartos”, expresó el residente. Un segundo entrevistado confesó que esperaba que esta experiencia ayudara a reducir los indices de criminalidad en el área.
Fuentes: Tribuna