Dublín, Irlanda.- La maquinista Paula Carbó Zea sospechaba que una propuesta de matrimonio podría estar cerca, pero nunca adivinó la forma tan peculiar en que su pareja Conor O'Sullivan haría la gran pregunta.
El hecho se dio el pasado martes, mientras la mujer conducía su tren hacia la estación Pearse en la ciudad irlandesa de Dublín, en ese momento se encontró con las palabras "¿Quieres casarte conmigo?", escritas en cuatro carteles.
"No tenía idea en absoluto, fue completamente una sorpresa. Él sabía que yo sospechaba algo y que la única forma de sorprenderme era en el trabajo”, dijo durante una entrevista para medio BBC News.
Tras detenerse en la estación, Carbó Zea bajó al andén donde Conor estaba de pie con flores y un anillo de compromiso esperando por ella, por lo que llena de emoción lo abrazó y le dio el anhelado sí.
En declaraciones al medio RTÉ, el ahora prometido confesó que estaba "nervioso y temblando" cuando el tren se acercaba, y "mucha gente se había detenido y comenzó a mirar y a sacar las cámaras".
Lo que Paula no sabía era que muchos de sus compañeros de trabajo ayudaron a hacer posible el mágico momento. Un conductor cambió un turno con ella para que estuviera en el tren correcto y otro se ofreció a terminar la ruta de la joven después de la propuesta.
Aunque aún no se ha fijado una fecha para la boda de la feliz pareja que vive en Dublín, ambos están de acuerdo en casarse en Barcelona, la ciudad natal de Carbó Zea.